Clorosis de hortensias: tratamiento, fotos y prevención.

La clorosis de la hortensia es una enfermedad de las plantas que se produce debido a una alteración de los procesos metabólicos internos, como resultado de lo cual se inhibe la formación de clorofila en las hojas. Su color cambia a amarillo, sólo las venas conservan el color verde. La causa de la clorosis es la deficiencia de hierro. Puede que haya muy poco en el suelo alrededor de la planta o que la propia hortensia no pueda absorberlo. En cualquier caso, el tratamiento de la enfermedad es necesario, no pasará por sí solo. Por lo general, basta con alimentar el arbusto con hierro para que el problema desaparezca.

El peligro de la clorosis foliar en las hortensias.

Una planta cuyas hojas no tienen suficiente clorofila no es capaz de abastecerse completamente de los carbohidratos necesarios para su nutrición. Esto conduce a la inhibición del crecimiento y desarrollo del arbusto. Comienza a desvanecerse, a perder su forma y belleza. En última instancia, si no se toman las medidas necesarias, la hortensia puede morir.

La aparición de la enfermedad es global; rara vez se observa coloración amarillenta localizada del follaje.

En algunos casos, el cambio de color de un día a otro es imperceptible.Se recomienda mirar la hortensia de vez en cuando y comparar su apariencia con las plantas vecinas.

Signos de clorosis en hortensias.

Los síntomas de clorosis en la hortensia de hojas grandes (así como en sus otras variedades) se manifiestan no solo en el color amarillento del follaje. Además, son posibles los siguientes signos de enfermedad:

  • reducción del tamaño de las hojas;
  • su marchitamiento o rizado, otros cambios de forma;
  • caída de hojas y flores;
  • cambiar la forma de los cogollos;
  • secado de brotes en el cono de crecimiento;
  • detener el desarrollo del sistema raíz;
  • Muerte parcial o total de las raíces.

Habitualmente se observan varios síntomas a la vez, ya que la falta de hidrocarburos que nutren a la planta afecta a todas sus partes casi simultáneamente.

Etapa avanzada de clorosis: se notan áreas de tejido foliar que mueren

¡Importante! El resultado es una muerte relativamente rápida de la planta, por lo que no se debe retrasar el tratamiento.

Causas de clorosis en hortensias.

La principal causa de la enfermedad es la falta de suficiente hierro en la planta, necesario para la formación de cloroplastos. Esto puede ser consecuencia de dos fenómenos:

  • falta de compuestos de hierro en el suelo;
  • incapacidad de la planta para absorber hierro, trastorno metabólico.

Y si en el primer caso todo es relativamente simple y la razón radica en la pobreza del suelo o sustrato utilizado para el cultivo de hortensias, entonces el segundo es mucho más complicado y es problemático descubrir qué causó esta violación.

Por ejemplo, en primavera pueden producirse trastornos metabólicos debido a las diferencias de temperatura entre el día y la noche. La velocidad de los procesos químicos en las raíces ubicadas en suelos fríos y en las hojas calentadas por el sol variará significativamente.Es decir, el sistema de raíces simplemente no podrá absorber la cantidad requerida de hierro del suelo.

Esto conducirá al hecho de que no habrá suficiente clorofila en los cloroplastos y comenzarán a realizar peor su función. La síntesis de carbohidratos se reducirá significativamente y las hojas cambiarán de color a amarillo debido a una cantidad insuficiente de pigmento verde.

¡Importante! Otra causa de clorosis puede ser una acidez insuficiente del suelo.

Debido a que las hortensias requieren un suelo con un pH de alrededor de 5,5 y agua con acidez neutra, incluso el riego regular aumentará el pH. Tarde o temprano, esto hará que la absorción de hierro del suelo se ralentice significativamente.

Cómo tratar la clorosis en hortensias.

Las preparaciones que contienen hierro se utilizan para tratar la clorosis de la hortensia paniculata. La industria moderna ofrece varios productos similares: Ferrovit, Anticlorosis, Micro-Fe, etc.

Básicamente, en estas preparaciones el hierro se utiliza en forma quelada, en forma de un compuesto complejo en forma de garra que se utiliza para introducir microelementos en el proceso metabólico.

Además, la clorosis de la hortensia se trata con preparaciones a base de sulfato de hierro. Puedes hacer esta composición tú mismo:

  • Disuelva 8 g de ácido cítrico en un litro de agua;
  • agregue 2,5 g de sulfato de hierro a la mezcla;
  • revolver bien.

Será un líquido con un tinte naranja. La composición resultante se rocía sobre las hojas de las plantas dañadas. Se puede conservar en el frigorífico durante dos semanas.

Los componentes para preparar un producto anticlorosis se pueden comprar en tiendas especiales.

También existe otra versión de la mezcla para el tratamiento de la clorosis.Para obtenerlo se disuelven 10 g de sulfato de hierro y 20 g de ácido ascórbico en un litro de agua. El método de uso y la vida útil de este producto son similares a los comentados anteriormente.

Cómo curar la clorosis de hortensias.

En general, el tratamiento de la hortensia para la clorosis consta de varias etapas e incluye lo siguiente:

  1. Reemplazar la tierra o sustrato en el que está plantada la planta. Dado que la hortensia es bastante sencilla y tenaz, lo más probable es que la causa de la clorosis radique en la falta de hierro. La aplicación regular, por supuesto, ayudará, pero no se puede fertilizar la planta con hierro constantemente. Por tanto, tendrás que reponer la tierra de la zona donde esté plantada la hortensia o renovar por completo el sustrato de la maceta.
  2. Regar con agua acidificada. La alcalinización del suelo afecta negativamente la capacidad del sistema de raíces de la hortensia para absorber hierro. Por tanto, es necesario regar periódicamente con agua acidificada o utilizar fertilizantes que aumenten la acidez (turba, estiércol, etc.)
  3. Utilizar productos especiales que contengan hierro para rociar la planta. Los fármacos comentados anteriormente deben usarse incluso después de que se haya reemplazado el sustrato. Esto es necesario para satisfacer rápidamente la necesidad de hierro de la planta.
¡Importante! Se permite agregar preparaciones de hierro no solo en forma de pulverización, sino también como cebo aplicado en la raíz.

Reemplazar el sustrato de las hortensias que crecen en el jardín es el primer paso para solucionar el problema de la clorosis.

Cabe recordar que el método de fertilización foliar es aún más eficaz. Cuando se rocía, la planta restablece completamente su equilibrio de hierro en 24 horas, y con alimentación de raíces, en 72 horas.

La prevención de enfermedades

Como se señaló anteriormente, una de las razones de la baja digestibilidad del hierro es la reducida acidez del suelo. Para solucionar este problema, conviene acidificar el suelo de vez en cuando. La forma más sencilla es utilizar ácido cítrico para este fin. Necesitará muy poco: se disuelven algunos granos en 1 litro de agua y se riegan las plantas con esta mezcla.

Hay otra forma de prevenir la clorosis: consiste en enterrar pequeños objetos metálicos oxidados en el jardín donde crece la hortensia: pernos, tornillos, clavos, etc. También puedes raspar el óxido de las superficies grandes y mezclarlo con la tierra debajo de las plantas.

¡Atención! Bajo ninguna circunstancia debes desoxidar la tierra debajo de la hortensia agregándole ceniza de madera.

Conclusión

La clorosis de las hortensias es una enfermedad caracterizada por una deficiencia de hierro en las células vegetales. Sus manifestaciones externas se reducen a un color amarillento de las hojas seguido de su caída. La falta de hierro provoca una disminución de la clorofila en la planta, lo que afecta al deterioro de su nutrición, al marchitamiento y a una mayor muerte. El tratamiento de la clorosis, que consiste principalmente en alimentar la hortensia con hierro, debe comenzar lo antes posible para que la planta no muera.

Deja un comentario

Jardín

flores