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Los beneficios y perjuicios del ajo al horno están determinados por su composición química y sus propiedades. En comparación con las verduras crudas, el producto horneado es menos picante. Gracias al tratamiento térmico, adquiere un sabor especial y su consistencia se vuelve como una pasta. Esta masa se consume tanto de forma independiente (untada sobre pan) como en combinación con otros aditivos (mostaza, requesón, yogur).
Composición química del ajo al horno.
El ajo horneado casi no se diferencia en composición química del ajo crudo. Incluye:
- Ácidos orgánicos;
- fibra dietética (fibra);
- ácidos grasos saturados e insaturados;
- vitaminas: C, grupo B;
- agua;
- potasio;
- calcio;
- yodo;
- magnesio;
- manganeso;
- hierro;
- fósforo;
- selenio.
Como resultado del procesamiento, el ajo cocido pierde algunos de los aceites esenciales que le confieren su aroma característico. Pero esto se puede evitar por completo si horneas los dientes sin limpiar la cabeza y los envuelves en papel de aluminio. El único inconveniente del producto horneado es que no contiene alicina. Esta sustancia tiene actividad antioxidante, pero se encuentra sólo en el clavo fresco.La ausencia de alicina no afecta en modo alguno al sabor.
Tiene entre 143 y 149 kcal por 100 g (sin incluir el aceite). Valor nutricional del producto (100 g): proteínas 6,5 g, grasas 0,5 g, carbohidratos 29,9 g.
¿Cuáles son los beneficios del ajo al horno?
Los beneficios del ajo al horno están determinados por su rica composición química. El producto tiene un efecto beneficioso sobre varios sistemas de órganos, despierta el apetito y ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
Para los hombres
El ajo al horno tiene beneficios para el organismo masculino. Es el siguiente:
- normalización de la función sexual;
- estimulación de la síntesis de testosterona;
- reducción de los niveles de colesterol en los vasos sanguíneos;
- aumento del flujo sanguíneo a todos los órganos;
- mejora de la función hepática;
- fortalecer el sistema inmunológico;
- supresión de procesos inflamatorios;
- prevención de la diabetes mellitus;
- restauración del sistema nervioso central.
El ajo al horno mejora la erección y normaliza la presión arterial en los hombres
Para mujeres
Este producto natural está recomendado para todo el mundo. El ajo al horno también tiene propiedades beneficiosas para la mujer, que se manifiestan en las siguientes:
- reducción del colesterol;
- disminución de la presión arterial;
- prevención de trombosis por adelgazamiento de la sangre;
- ralentizar el proceso de envejecimiento;
- prevención del cáncer de útero y de mama;
- fortalecer huesos y articulaciones, prevenir la osteoporosis;
- mejora de la condición del cabello;
- despertar del apetito;
- estado de ánimo mejorado.
Sin embargo, en el tercer trimestre es mejor excluir el producto o cambiar solo a productos horneados. Si se producen alergias u otros efectos secundarios, consulte a su médico.
Para niños
A los niños también se les puede dar ajo en pequeñas cantidades periódicamente, comenzando con un diente al día. Si no existen contraindicaciones médicas, se puede empezar a partir del noveno mes. Esto es especialmente importante si padece alguna enfermedad del sistema digestivo o reacciones alérgicas.
Los beneficios del ajo al horno para los niños se reducen a los siguientes:
- fortalecer el sistema inmunológico;
- prevención del raquitismo;
- luchar contra los gusanos;
- estimulación del apetito;
- efecto antibacteriano;
- remedio adicional contra ARVI.
Como resultado, se encontró que las personas que incluyen regularmente el producto en su dieta sufren resfriados 3 veces menos que aquellas que no lo consumen en absoluto.
Cómo hornear ajo entero en el horno.
Cuando se procesa, la verdura pierde su aroma, pero se vuelve menos picante. Al asarlo, los dientes se transforman en una pasta espesa que es fácil de untar sobre el pan. La receta clásica incluye los siguientes ingredientes:
- ajo - cabezas enteras y sin pelar;
- sal y pimienta para probar;
- aceite de oliva;
- tomillo seco o fresco - unas pizcas.
Para asar ajo en el horno necesitarás papel de aluminio.
También puedes utilizar romero o albahaca en lugar de tomillo. La cocción se realiza en el horno, por lo que necesitarás un molde (o bandeja resistente al calor) y papel de aluminio. Las instrucciones son:
- Corta la capa superior de las cabezas para que los dientes queden expuestos. No es necesario enjuagar nada y mucho menos limpiarlo, deben permanecer intactos.
- Coloque la parte inferior hacia abajo (con el lado cortado hacia arriba) en el molde. No es necesario echarle aceite ni agua.
- Espolvorea cada cabeza con un poco de sal, pimienta, tomillo u otras especias.
- Rocíe aceite de oliva sobre cada cabeza hasta que se filtre entre los dientes.
- Cubre la sartén con papel de aluminio o envuelve cada cabeza. Esto se debe hacer de forma hermética para que la verdura no pierda su sabor durante el horneado.
- Colocar en un horno precalentado a 200 grados.
- Hornee durante 50 a 60 minutos.
- Retire y retire el papel de aluminio. Proceda con precaución ya que los vapores pueden quemarle las manos.
- Deje que se enfríe a una temperatura tal que pueda levantar los dientes.
- Pelar cada uno de ellos, triturar el contenido en un plato aparte.
La pasta de ajo resultante se puede untar sobre tostadas, galletas saladas o usarse como refrigerio adicional para un plato de carne o verduras. Se utiliza tanto en forma pura como con aditivos. Por ejemplo, puedes tomar dos cucharadas de pasta y mezclar con los siguientes ingredientes:
- mostaza dulce – 1 cucharadita;
- requesón – 1 cucharada. l.;
- yogur sin azúcar y otros aditivos – 150 ml;
- ramita de eneldo (solo hojas) – 1 ud.
Se mezclan todos los ingredientes, luego se agrega eneldo finamente picado y sal al gusto. El aderezo es adecuado para platos de carne y pescado.
Contraindicaciones y posibles daños.
El uso de ajo al horno está contraindicado en presencia de enfermedades crónicas (no solo digestivas, sino también de otros sistemas):
- gastritis;
- colelitiasis del hígado;
- úlcera del duodeno, estómago;
- diarrea;
- insuficiencia renal;
- hipotensión arterial;
- intolerancia individual a los componentes, alergias;
- enfermedades de los ojos;
- arritmia;
- epilepsia (puede provocar una convulsión);
- embarazo (últimas etapas).
Según las recomendaciones de la OMS, se pueden consumir hasta 5 g de ajo al día, es decir. 1-2 dientes medianos
En el caso de un producto cocido se puede aumentar ligeramente la cantidad, ya que no resulta tan picante. El ajo al horno no sólo tiene beneficios, también tiene contraindicaciones. En cantidades excesivas, este producto puede provocar varios efectos secundarios:
- Despertar el apetito contribuye indirectamente al aumento de peso.
- El jugo de ajo irrita el revestimiento del estómago y los intestinos, lo que puede provocar acidez de estómago, eructos e incluso úlceras.
- La verdura tiene un efecto colerético: en exceso puede provocar una fuerte salida de bilis.
- El producto puede provocar alteraciones del ritmo cardíaco.
- Existe evidencia de que el ajo horneado y especialmente el fresco reducen la gravedad de la reacción: esto lo deben tener en cuenta, por ejemplo, los conductores.
- Para las personas mayores, el abuso del ajo es peligroso para el desarrollo de demencia senil. También hay evidencia contraria de que su uso fortalece la memoria.
Por tanto, los beneficios y perjuicios para la salud del ajo horneado están determinados por su dosis. Pero para las personas con enfermedades crónicas, este producto puede resultar peligroso incluso en pequeñas cantidades.
Conclusión
Los beneficios y perjuicios del ajo al horno no difieren de las propiedades del producto fresco. Se puede consumir en cantidades razonables. Vale recordar que tanto los dientes como la pasta de ajo despiertan el apetito (aunque el producto en sí no es muy rico en calorías). Por lo tanto, este tipo de alimentos no son adecuados para una dieta.
Reseñas sobre los beneficios del ajo al horno.