Compota de fresas y grosellas (negra, roja): recetas para el invierno y para todos los días.

La compota de grosella negra y fresa sorprenderá a tu hogar por su dulce sabor y agradable aroma. Esta bebida se prepara para el invierno con bayas frescas y, después de la temporada de verano, con frutas congeladas. Esto prácticamente no afecta la calidad, pero siempre habrá un producto vitamínico natural en la mesa en lugar de limonadas compradas en la tienda, que contienen una gran cantidad de sustancias nocivas para el organismo.

Características de preparar compota de grosellas y fresas.

Cada ama de casa quiere preparar una deliciosa compota que se almacene durante mucho tiempo y las bayas permanezcan intactas.

Los chefs experimentados dan los siguientes consejos:

  1. Elija las frutas adecuadas. No se deben utilizar los demasiado maduros, lo que ayudará a preservar su integridad.No acepte productos estropeados o dañados. Es mejor cosechar en clima seco, de lo contrario las bayas quedarán acuosas.
  2. Puedes tomar una variedad de grosella roja, que le dará a la compota una acidez peculiar.
  3. Será necesario eliminar por completo los restos y las hojas, así como los tallos de las fresas (solo después del lavado, de lo contrario los frutos se saturarán de agua). A continuación, debes dejar que las bayas se sequen un poco sobre un paño de cocina.
  4. Es necesario observar estrictamente las proporciones de azúcar, y si es necesario almacenar a temperatura ambiente, agregar un poco de jugo de limón, que actuará como conservante adicional.
  5. Enjuague bien la cristalería con una solución de soda y esterilícela de forma accesible junto con las tapas. Para ello, puedes mantener el recipiente al vapor durante 15 minutos, cocinarlo al vapor en el horno durante un cuarto de hora a 150 grados o utilizar el microondas.
  6. Deja un poco de espacio para sellar bien los frascos.
¡Consejo! No debes tirar las bayas de la compota si nadie se las come. Son perfectos para decoración o relleno de productos de repostería.

También es necesario recordar que es mejor preparar la bebida y el almíbar en recipientes esmaltados o de acero inoxidable.

Recetas de compota de grosellas y fresas para el invierno.

Es mejor echar un vistazo más de cerca a las recetas populares de compotas para comprender la tecnología de preparación del relleno para el invierno. Con una pequeña cantidad de ingredientes se obtendrá una bebida maravillosa que te calentará con su sabor.

Receta tradicional de compota de grosellas y fresas para el invierno.

Se describirá inmediatamente una receta que no requiere esterilización adicional de la compota.

Ingredientes para un tarro de 3 litros:

  • grosella negra – 300 g;
  • fresas – 300 g;
  • azúcar – 400 g.

Preparación paso a paso de compota:

  1. Prepare las bayas quitando los restos, las hojas y los frutos faltantes.Corta las fresas grandes por la mitad, quita las grosellas de las ramas.
  2. Colóquelo en un recipiente de vidrio preparado y vierta agua hirviendo sobre él.
  3. Dejar tapado durante 10 minutos. Vierta el líquido nuevamente en la sartén, dejando las bayas en el frasco.
  4. Hervir el almíbar, agregar azúcar y llenar el recipiente con bayas.

Solo queda cerrar bien las tapas con una máquina de coser. Deje enfriar completamente, tapado y boca abajo.

Compota de fresas y grosellas rojas y negras para el invierno.

A la familia definitivamente le gustará la compota variada. Las grosellas negras añaden sabor. Los frutos rojos diluyen el sabor con acidez, también contienen sustancias que ayudan a conservar la bebida durante mucho tiempo.

Conjunto de productos:

  • dos tipos de grosellas (rojas y negras): 150 g cada una;
  • azúcar – 250 g;
  • fresas (puedes tomar silvestres) – 300 g.

Proceso de cocción:

  1. Procese todas las bayas con anticipación. Para ello, límpielo de hojas y restos, separe las grosellas de las ramas, enjuague bien y seque, colocándolas sobre un paño de cocina.
  2. Transfiera la mezcla a un frasco limpio y esterilizado.
  3. Hervir agua y llenar el recipiente hasta el cuello. Tapar y dejar reposar unos minutos.
  4. Vuelve a verter el líquido en el bol esmaltado y vuelve a ponerlo al fuego, esta vez con azúcar. Cuece el almíbar durante un par de minutos.
  5. Vuelva a llenar los frascos y ciérrelos inmediatamente.

Dar la vuelta y cubrir con una manta. Dejar reposar un día hasta que esté completamente frío.

Compota de fresas con hojas de grosella para el invierno.

Si a alguien no le gustan las grosellas en compota por las pequeñas bayas, puede resaltar el sabor con las hojas de este arbusto.

Para dos botes de 3 litros necesitarás los siguientes productos:

  • fresas – 1,8 kg;
  • grosellas (hojas verdes) – 30 piezas;
  • azúcar granulada – 900 g.

Algoritmo de acciones:

  1. Lavar las fresas y quitarles los tallos.
  2. Transfiera con cuidado al fondo de los frascos.
  3. Agregue allí las hojas de grosella lavadas y secas.
  4. Coloca una cacerola con la cantidad necesaria de agua al fuego. Vierta el líquido hirviendo sobre las bayas, cierre sin apretar y reserve durante un cuarto de hora.
  5. Escurrir el jugo, hervir el almíbar con azúcar.
  6. Llena el frasco de fresas con la mezcla hirviendo e inmediatamente enrolla.

Extiende una manta en la que colocar el recipiente boca abajo y tápalo bien.

Recetas de compota de grosellas y fresas para todos los días.

A algunas personas no les gusta hacer preparativos o simplemente no tienen espacio para guardarlo. Pero incluso en invierno, puedes complacer a tu familia con una deliciosa compota cocinándola con bayas congeladas. De esta forma siempre habrá una bebida vitaminada fresca en la mesa.

Compota de fresas y grosellas negras

La compota tendrá un sabor maravilloso y un color agradable.

Ingredientes:

  • fresas – 200 g;
  • azúcar – 100 g;
  • cardamomo (opcional) – 3 piezas.;
  • grosellas – 100 g;
  • agua – 1,5 litros.
¡Consejo! Si no tienes frutos rojos congelados en tu casa, puedes comprarlos en cualquier supermercado.

Receta detallada de compota de fresas y grosellas negras:

  1. Coloca una olla con agua al fuego. Agrega azúcar granulada.
  2. Cuando hierva, añade las grosellas y las fresas (no es necesario descongelarlas).
  3. Cocine la compota después de que aparezcan burbujas a fuego medio durante 3 minutos.
  4. Agrega el cardamomo, apaga el fuego.

Déjelo reposar a temperatura ambiente durante 20 minutos para realzar el sabor.

Cómo cocinar compota de grosellas y fresas.

La compota de fresas silvestres resultará ser simplemente una "bomba" de vitaminas.

Compuesto:

  • grosella negra – 400 g;
  • agua – 3,5 litros;
  • fresas – 250 g;
  • azúcar – 1 cucharada.

Receta paso a paso:

  1. Prepara las bayas. Primero, clasifique y enjuague, luego sepárelo de las ramas y corte los tallos. Si se utilizan frutas congeladas, no es necesario hacer nada.
  2. Pon agua en un cazo al fuego y sumerge primero las grosellas, que le darán color.
  3. Después de hervir, agregue las fresas silvestres y el azúcar.
  4. Cocine por 10 minutos, revolviendo constantemente.
  5. Colocar la tapa encima, apagar el fuego y dejar infusionar.

La preparación de la bebida puede determinarse por las bayas que se han hundido hasta el fondo.

Cómo cocinar compota de grosellas y fresas en una olla de cocción lenta.

El uso de equipos para preparar compotas para todos los días simplifica enormemente el proceso para el ama de casa. El sabor sigue siendo excelente.

Conjunto de productos:

  • azúcar – 6 cucharadas. l.;
  • bayas variadas congeladas – 300 g;
  • agua – 2,5 litros.

Algoritmo de acciones:

  1. Vierta grosellas y fresas congeladas en el recipiente multicocina.
  2. Agrega el azúcar y el agua fría. Mezcla.
  3. Coloca el bol y enciende el modo “Vapor” durante 20 minutos.
  4. Espere la señal. Durante el proceso, a veces se puede abrir y revolver para que la composición no se queme.

La bebida preparada en una multicocina está lista para beber inmediatamente. Colar y servir.

Cómo hacer compota de grosellas y fresas

Esta compota de rubí está buena tanto caliente como fría. En verano, puedes añadir cubitos de hielo al vaso.

Ingredientes:

  • fresas (frutas pequeñas) – 2 kg;
  • agua filtrada – 2 litros;
  • azúcar granulada – 0,5 kg;
  • grosellas rojas – 1 kg.

Proceso sencillo paso a paso:

  1. Preparar el almíbar poniendo a hervir el agua y el azúcar.
  2. Agrega las bayas. Si están frescos, hay que separarlos con antelación, lavarlos y quitarles los tallos de las fresas pequeñas y las ramas de las grosellas rojas maduras.
  3. Llevar a ebullición a fuego lento.
  4. Apagamos y dejamos reposar tapado durante un cuarto de hora.

Si es necesario colar, enfriar y verter en vasos.

Reglas de almacenamiento

Las compotas de grosellas y fresas maduras para el invierno se conservan perfectamente a temperatura ambiente si se siguen todas las reglas del proceso tecnológico durante todo el año. En caso de duda, la bebida se puede bajar a la bodega (no se debe aumentar la humedad del aire) o simplemente agregar ácido cítrico durante la preparación, que es un buen conservante.

Es mejor guardar las compotas para todos los días en el frigorífico, después de colar las bayas, y no dejarlas por más de un día. Congelado en PET o contenedor, el producto se puede conservar durante 6 meses, sólo hay que anotar la fecha de fabricación. Es mejor que los niños sirvan una bebida recién preparada de una cacerola.

Conclusión

La compota de grosella negra y fresa, de rico sabor, color y aroma, se convertirá en la bebida favorita de toda la familia. De las recetas presentadas, el ama de casa definitivamente elegirá la mejor opción para ella. No debes comprar jugos comprados en tiendas con conservantes dañinos cuando puedes preparar un producto natural.

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